Y si no puedes más, no lo dejes, no pares, no acabes, es darle la razón y que venzan aquellos que sin tener nada que ganar, sólo querían lastimarte e impedirte ser. Y siendo aun más fuerte e inteligente que ellos, tampoco es por ellos. Ganar no es tampoco por la gente que está a tu lado. Muy al fondo y aunque suene muy narcisista, al final es por ti.
Siempre habrá alguien que te pueda entender, alguien que habrá podido pasar por situaciones parecidas, alguien a quién la vida en algún momento quiso ponerle un gran reto, un gran desafío, o simplemente le puso una carga. Una carga que muchas veces no tiene que ser respondida por ti, por nosotros, por ellos.